El Arzobispo de Valladolid (España), Mons. Luis Argüello, ha definido como "revolucionario" en nuestro tiempo hacer presente lo sobrenatural en las calles a través de las vestiduras propias de las personas religiosas, consagradas u ordenadas.
El Prelado hacía esta reflexión en la homilía pronunciada con motivo de una ordenación diaconal, cuando se refirió a la posibilidad de llevar vestiduras específicas de los diáconos.
"Vais a llevar un vestido propio. Sobre el alba se os va a colocar una estola al modo diaconal y una dalmática. Y además podéis vestir un vestido clerical, podéis llevar un distintivo para que se vea en la plaza pública que sois hombres consagrados al Señor", explicó el Arzobispo.
"Hubo un tiempo en el que la novedad pareció que tenía que ver con quitarnos la
sotana y el clergyman. Hoy hay un tiempo en el que seguramente lo revolucionario, lo novedoso, la presencia de los sobrenatural en las calles y las plazas, sea que los frailes lleven hábito que las monjas se han reconocibles y que los que hemos sido ordenados también lo sean", añadió.
La consideración de "revolucionario" también fue atribuida a las promesas que realizan los diáconos al ser ordenados: "Hermanos, lo que estos amigos van a prometer hoy es una novedad revolucionaria que nuestro mundo necesita", explicó el Prelado en referencia también al compromiso de rezar la liturgia de las horas, a guardar celibato y a obedecer.