Convocados bajo el lema: "Junto a María, nos volvemos a encontrar como Iglesia sinodal", más de 300 mil jóvenes del noroeste argentino (NEA) peregrinaron al Santuario de la Virgen de Itatí en la Arquidiócesis de Corrientes.
Los representantes juveniles de las distintas diócesis se volvieron a congregar presencialmente después de dos años, manifestando preocupaciones, expectativas y compromiso con la realidad que les toca vivir en esa región del país.
"Vivimos una verdadera fiesta de hermanos porque somos familia. Una iglesia que camina, hace ruido, como nos propone el Papa Francisco", dijo la coordinadora de Pastoral Juvenil de la diócesis de Posadas, Marianela Villar.
Los jóvenes caminaron más de 72 kilómetros que separan la capital correntina con la localidad de Itatí, acompañados por un centenar de vehículos de apoyo.
"Celebramos que la juventud abrace a nuestra Madre que los cuida y protege. Ella marca el camino, dándonos fuerza y esperanza todos los días", señaló Villar.