ROMA,
En declaraciones al diario italiano “Corriere della Sera”, el Cardenal Pio Laghi, ex Nuncio Apostólico en Estados Unidos, anticipó el tono y contenido del próximo encuentro entre el Papa Juan Pablo II y el Presidente George Bush.
Para el Purpurado, es "bueno" que Bush visite al Santo Padre este 4 de junio porque el Papa "le tiene que hablar" para reiterarle su rechazo a la violencia.
El Cardenal Laghi no cree que la visita de Bush sea sólo un gesto en campaña electoral porque "si había un momento menos adecuado en el que pedir un encuentro con el Papa, era éste, y sin embargo, creo que ha insistido varias veces e incluso ha cambiado su agenda".
"El Papa ya advirtió que la lucha contra el terrorismo no puede ser sólo represiva y punitiva" y ahora le dirá Bush que lo que está haciendo Estados Unidos "no lleva a Oriente Próximo" a que se cumpla lo establecido por el Derecho de los Pueblos, indicó.
El Cardenal Laghi, que fue el enviado especial del Papa a dialogar con Bush antes del inicio de la guerra en Irak, señaló que ahora "estamos al borde del precipicio y hay que detenerse. Nos lo dice el horror desencadenado por las torturas a los prisioneros iraquíes y la decapitación del rehén norteamericano y los cuerpos de los soldados israelíes. Hay que detenerse y creo que Estados Unidos tiene la fuerza para dar el primer paso".
"Bombardear mezquitas, entrar en ciudades santas y desnudar a hombres delante de mujeres soldado significan una incomprensión del mundo musulmán sorprendente. Hacia el Islam se tienen que construir puentes y no muros", señaló el Purpurado.