El Obispo de Orihuela-Alicante (España) Mons. José Ignacio Munilla ha publicado una carta pastoral en la que reivindica la actualidad de los Ejercicios Espirituales a los 500 años de la de "la primera conversión de San Ignacio, acontecida durante su convalecencia en Loyola".
"Para en todo amar y servir, apostemos por los ejercicios espirituales", exhorta Mons. Munilla, que los define como "un itinerario luminoso para vivir nuestra existencia en permanente estado de conversión, más allá de nuestras miserias, en la esperanza de que el Espíritu Santo coronará la obra buena que comenzó en nosotros".
El Prelado, destaca que se trata "de un tesoro que ha sido encarecidamente recomendado por el magisterio de muchos Papas" con el que San Ignacio "nos ha mostrado cómo conocer y amar al Padre y cómo vivir nuestra condición de hijos de Dios".
En definitiva, los ejercicios espirituales son "un cauce seguro para perseverar en el camino emprendido en el bautismo".
De hecho, el Obispo de Orihuela-Alicante pide "que nos pongamos todos en camino, con la mano fuertemente asida en el arado" para "crear un nuevo estilo de vida en el que la contemplación, la meditación, el discernimiento y el sentir con la Iglesia formen parte de nuestra vida cotidiana y nos acompañen a lo largo de toda la vida".
Mons. Munilla destaca que los ejercicios espirituales de San Ignacio "difieren mucho de otros métodos autorreferenciales que proliferan en nuestros días" ya que "no buscan como fin último el sentirse bien, sino ser ofrenda de amor para el mundo (...) de forma que en todo busquemos amar y servir, para mayor gloria de Dios".