Jonathan Turley, analista legal y abogado penalista que enseña en la George Washington University, lamentó que existan antropólogos y académicos que ya no quieren identificar los restos humanos como pertenecientes a hombres o mujeres.
En un artículo publicado el 18 de julio en su sitio web, Turley explicó que actualmente se está suscitando "una controversia interesante en los departamentos de antropología donde los académicos han pedido a los investigadores que dejen de identificar restos humanos antiguos por género biológico porque no pueden evaluar cómo se identificaba una persona en ese momento".
Otros académicos, continuó el abogado, "están pidiendo a los investigadores que dejen la práctica de identificar la raza, porque esto alimenta la supremacía blanca".
Turley indicó que el sitio web College Fix señala "la campaña del Trans Doe Task Force para 'explorar las formas en que los estándares actuales en la identificación humana forense perjudican a las personas que no encajan claramente en el sistema binario de género'", es decir que no se identifican como hombres o mujeres.
Uno de los expertos señalados es la profesora asociada de la Universidad de Kansas, Jennifer Raff, quien asegura en su libro "Origen: una historia genética de las Américas", que "no hay divisiones claras entre individuos física o genéticamente 'masculinos' o 'femeninos'".
Una estudiante de posgrado, Emma Palladino, indicó que "los arqueólogos que encuentren tus huesos algún día te asignarán el mismo sexo que tenías al nacer, así que independientemente de si haces o no la transición, no puedes escapar de tu sexo asignado".