VATICANO,
El Presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, el Cardenal Matteo Zuppi, comunicó que los obispos italianos ven "con gran preocupación la situación política que se está desarrollando".
Estas declaraciones las hizo ante la crisis política que atraviesa el gobierno de Italia, "que corre el riesgo de solaparse con una fase de crisis más general que ya está afectando fuertemente a la vida de las personas y las familias", subrayó el cardenal.
"La guerra de Ucrania y sus aterradoras consecuencias; la inflación en niveles excepcionales que requiere continuidad e intervenciones urgentes; la pandemia que no dejan de golpear; el trabajo mortificado por la precariedad y la incertidumbre general, son elementos que requieren claridad en las decisiones y una fuerte concertación con los interlocutores sociales y con Europa", destacó el Presidente de la CEI.
Además, defendió que "la confrontación dialéctica y el pluralismo son una riqueza irrenunciable de la democracia, más aún en vista de los próximos plazos electorales naturales, pero en un momento como éste, es necesario que se produzca en la máxima convergencia y estabilidad para terminar de poner en marcha las intervenciones decisivas".
"Por ello, esperamos que emerja una responsabilidad en nombre del interés general del país, que debe prevalecer sobre las posiciones partidistas, aunque legítimas, para identificar lo que es necesario y posible por el bien de todos", concluyó.
El Presidente de la Conferencia Episcopal Italiana hizo estas declaraciones después de que el primer ministro italiano, Mario Draghi, presentara su dimisión el pasado 14 de julio tras 17 meses en el cargo.