El Obispo de Córdoba (España), Mons. Demetrio Fernández, dio una receta especial para que la evangelización y el apostolado no lleguen "a aburrir al más animoso"
En su carta semanal, el Prelado desentraña la enseñanza del evangelio correspondiente al decimosexto domingo del tiempo ordinario en el que se narra la estancia de Cristo en casa de sus amigos Marta, María y Lázaro en Betania.
Mons. Fernández detalla que "Marta se queja porque está centrada en el servicio", pero que Jesús no reprocha su actividad sino "que esté inquieta y nerviosa con el trabajo que realiza y por el que se distrae de escuchar a Jesús".
El Obispo subraya en este sentido que "lo importante en la vida es estar atentos a Dios, a la palabra de Jesús. Todo lo demás es secundario, es decir, viene después".
La pregunta que se plantea con este evangelio a juicio del Obispo es sobre "qué es más importante, la vida contemplativa o la vida activa".
El Prelado argumenta que son muchos los que no comprenden que una persona dedique su vida a la contemplación porque "les parece una vida inútil", en relación a la gran tarea apostólica que siempre apremia al cristiano y que es ingente.