Con la mediación de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE), este 30 de junio se logró el acuerdo entre el Gobierno y los representantes indígenas que puso fin al paro nacional, luego de 18 días de protestas.
El acuerdo fue firmado en el auditorio de la parroquia Santísima Trinidad, en la capital Quito. Entre los representantes eclesiales estuvo el presidente de la CEE, Mons. Luis Cabrera, quien agradeció "por confiar en la mediación de la Iglesia" y aseguró que pueden contar "siempre con nosotros en este camino de esperanza".
De parte del gobierno de Guillermo Lasso estuvieron presentes el ministro de Gobierno, Francisco Jiménez; el secretario de la Administración, Iván Correa; y el secretario jurídico de la Presidencia, Fabián Pozo.
Por el movimiento indígena participaron el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), Leonidas Iza; de la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin), Gary Espinoza; y del Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine), Eustaquio Tuala.
El 13 de junio comenzó en Ecuador un paro nacional convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), para exigirle al Gobierno la reducción de los precios de los combustibles, garantizar "precios justos" en los productos de primera necesidad y dar subsidios a los pequeños agricultores, entre otras demandas.