Entre 2009 y 2012 se llevaron a cabo diversos estudios sobre la forma consagrada, resultando que aquella "sustancia rojiza" era en realidad sangre del tipo AB, en la que había hemoglobina y ADN de origen humano.
4. Perú
Este milagro eucarístico ocurrió el 2 de junio de 1649 en Eten, durante la oración de las vísperas y la exposición del Santísimo Sacramento en honor a la fiesta del Corpus Christi.
Según señala el sitio web, cuando "el fraile franciscano Jerome de Silva Manrique estaba reservando la Custodia en el tabernáculo", todos los fieles presentes vieron que en la hostia apareció "un rostro resplandeciente de un niño" con "rizos castaños".
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Fray Marco López, superior del convento de Chiclayo, relató que el 22 de julio de ese año, durante la exposición del Santísimo, "el Divino Niño Jesús" volvió a aparecer en la hostia. Según los testigos, "en la Hostia aparecían tres pequeños corazones blancos, unidos entre sí, simbolizando las tres Personas de la Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo", indicó.
Esta vez lo vieron vestido con una camisa "según la usanza de los indios" y con "una túnica de color morado". Según se explica el suceso, que duró 15 minutos, el Niño Jesús "quería identificarse con los habitantes mochica de Eten" y "demostrarles su amor".
5. Venezuela
Este milagro eucarístico ocurrió en una Misa celebrada el 8 de diciembre de 1991 en Betania, cuando un sacerdote vio durante la consagración que la hostia comenzó a sangrar.
Según relata el sitio web, el P. Otty Ossa Aristizábal estaba celebrando Misa en el Santuario mariano de Fina de Betania, en Cúa, cuando, tras partir la Hostia magna, vio que en la patena uno de los trozos "tenía una mancha roja y de ella empezó a brotar una sustancia roja, de forma similar al modo en que la sangre brota de una herida".
El P. Aristizábal contó que guardó la hostia en la sacristía y que al día siguiente vio que la hostia seguía sangrando, pero "sólo de un lado de la partícula", sin manchar "el resto de las especies eucarísticas". El sitio web señaló que los fieles que estaban en Misa vieron el suceso.