Al recibir esta mañana en el Vaticano a una delegación de budistas de Tailandia, el Papa Francisco hizo una reflexión sobre los valores comunes con los cristianos y se refirió a las enseñanzas de Buda y Jesús.
"En un momento en que la familia humana y el planeta afrontan múltiples amenazas, un diálogo amigable y una estrecha colaboración son todavía más necesarios", dijo el Santo Padre a los 33 monjes budistas, 60 budistas laicos y algunos representantes católicos de la Iglesia en Tailandia.
"De todas partes escuchamos el grito de una humanidad herida y de una tierra lacerada. Buda y Jesús han comprendido la necesidad de superar el egoísmo que genera conflictos y violencia", continuó el Santo Padre.
El Papa Francisco dijo además que "el Dhammapada (NdR: escrito sagrado budista) resume así las enseñanzas de Buda 'evitar el mal, cultivar el bien y purificar la propia mente'", mientras que "Jesús dice a sus discípulos 'os doy un mandamiento nuevo: que os améis los unos a los otros como yo los he amado, así ámense entre unos y otros'".
En ese sentido, continuó, "es nuestra tarea hoy guiar a nuestros respectivos fieles hacia un sentido más vivo de la verdad que somos todos hermanos y hermanas".
"Eso comporta que debemos trabajar juntos para cultivar la compasión y la hospitalidad para todos los seres humanos, especialmente por los pobres y los marginados", aseguró el Papa Francisco.