El Obispo de Córdoba (España), Mons. Demetrio Fernández, recordó que la Iglesia Católica no puede vivir sin sus sacerdotes, subrayando que son "una necesidad vital".
"La Iglesia no puede vivir ni sobrevivir sin sacerdotes. Se trata de una necesidad vital. Porque no puede vivir sin la presencia de Cristo que la vivifica continuamente por los sacramentos, y especialmente por la Eucaristía", escribió el Prelado en su más reciente carta semanal, sobre la ordenación de cinco nuevos sacerdotes el 18 de junio, día de las Sagradas Órdenes.
"Sin sacerdotes no hay Eucaristía ni perdón sacramental de los pecados, ni acompañamiento a tantas personas que buscan esa presencia de Cristo a su lado", resaltó el Obispo.
Tras señalar que el camino al sacerdocio no es fácil, quienes buscan responder a Dios en esta vocación deben buscarlo en la oración.
"En la serenidad de la oración, con el consejo de los formadores y con la ayuda de los hermanos seminaristas, el horizonte va aclarándose hasta llegar a la certeza moral: Dios me llama para ser su sacerdote, Jesucristo me llama para que sea suyo totalmente, la gente necesita del sacerdote para acercarse a Dios. Aquí estoy, envíame, como dijo el profeta", escribió el Prelado español.
Luego de señalar que un sacerdote es una bendición para las familias, las parroquias y los compañeros seminaristas, el Obispo de Córdoba alentó a los jóvenes a no tener miedo de decirle sí al Señor.