MADRID,
El Nuncio Apostólico en España, Mons. Manuel Monteiro de Castro, aclaró que “dar alguna regulación” a las parejas homosexuales no implica que éstas puedan equipararse al matrimonio.
Mons. Monteiro hizo estas declaraciones a un grupo de periodistas tras el inicio de la 82º Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal. El Nuncio resaltó en su intervención ante los obispos españoles cómo “la nueva situación política abre para la Iglesia nuevos desafíos, ante los que habrá de responder adecuadamente”.
Para el Nuncio, aunque el derecho español y el del resto de países europeos reconoce como matrimonio la unión entre un hombre y una mujer, también “están otras formas de convivencia” que “no son la misma cosa”.
“Dejemos el matrimonio para lo que se conoce desde siempre como tal, y las otras cosas pues que se llamen con otros nombres”, señaló Mons. Monteiro de Castro e indicó que no se pide que se desconozcan los derechos de los homosexuales.
Más adelante, el Arzobispo recordó que a los homosexuales “la Iglesia procura ayudar también en su vida espiritual” pero enfatizó que “los matrimonios entre ellos son totalmente contrarios a la doctrina de la Iglesia Católica”.
Por su parte, el Cardenal Antonio María Rouco Varela, en su discurso de apertura de la Plenaria defendió la legitimidad primera de la institución matrimonial, enfatizando que “el matrimonio, engendrando y educando a sus hijos, contribuye de manera insustituible al crecimiento y estabilidad de la sociedad», por lo que «le es debido el reconocimiento y el apoyo legal del Estado”.