VATICANO,
En la mañana de este lunes 13 de junio, el Papa Francisco recibió en audiencia a los participantes del Capítulo General de los Misioneros de África, conocidos como los Padres Blancos.
Al comenzar su discurso, el Papa Francisco lamentó de nuevo haber tenido que posponer su viaje al Congo y Sudán del Sur por motivos de salud: "a mi edad no es tan fácil ir a una misión", aseguró ante los presentes.
A continuación, subrayó la importancia de la gratitud en su misión y explicó que "quien no sabe agradecer a Dios los dones que ha sembrado a lo largo del camino -aunque sea fatigoso y a veces doloroso- no tiene siquiera un alma esperanzada, abierta a las sorpresas de Dios y confiada en su providencia".
"Una comunidad en la que sabemos decir 'gracias' a Dios y a nuestros hermanos, y en la que nos ayudamos mutuamente a esperar en el Señor Resucitado es una comunidad que atrae y apoya a los que son llamados", dijo el Santo Padre.
En su mensaje a los misioneros, el Papa Francisco explicó el sentido de la misión como testimonio profético y defendió que "el apóstol de Jesucristo no es alguien que hace proselitismo, no es un gestor, no es un conferenciante erudito, no es un 'mago' de la informática, el apóstol es un testigo".
"Esto es cierto siempre y en todas partes en la Iglesia, pero es especialmente cierto para aquellos que, como ustedes, a menudo son llamados a vivir la misión en contextos de primera evangelización o de prevalencia de la religión islámica", explicó.