La Diócesis de Ondo, en Nigeria, territorio donde hombres armados atacaron una iglesia católica y asesinaron e hirieron a decenas de personas en la Misa de Pentecostés, pidió ayuda para aliviar el sufrimiento de las víctimas y sus familias.
El 5 de junio, en la Solemnidad de Pentecostés, hombres armados irrumpieron en la iglesia católica de San Francisco Javier, en la localidad de Owo, estado de Ondo, y mataron a balazos a decenas de fieles. Muchos señalan como posibles culpables a los pastores fulani, violentos grupos de mayoría musulmán.
El Obispo de Ondo, Mons. Jude Arogundade, denunció que se usaron explosivos dentro y fuera de la iglesia. A la fecha el atentado terrorista ha dejado 38 muertos confirmados– entre ellos cinco niños- y decenas de heridos que están siendo atendidos en los hospitales locales.
En un comunicado del 7 de junio compartido con ACI África –agencia del Grupo ACI-, el P. Mateo Ologun, Coordinador de Salud de la Diócesis de Ondo (Nigeria) agradeció la solidaridad con su pueblo, ý señaló que siguen necesitando ayuda económica para dar soporte a las familias afectadas.
"Le escribimos para agradecerle su preocupación por el obispo, los sacerdotes y los fieles laicos de la Diócesis de Ondo, los grupos de oración de la iglesia de San Francisco Xavier, Owo y las buenas personas de Ondo, desde que ocurrió el ataque terrorista", dijo el P. Mateo Ologun.
El sacerdote anunció que tienen una nueva cuenta bancaria, "donde se pueden hacer donaciones financieras", que serán utilizadas para brindar "alivio a las víctimas y a la Iglesia Católica", señaló. "Que Dios recompense sus buenos corazones", agregó.