VATICANO,
"Dios nos da la libertad, no somos marionetas, somos seres humanos con libertad para hacer el bien o el mal", aseguró el P. Bruce Nieli, sacerdote que acudió al lugar donde ocurrió el tiroteo en Texas, en el que 19 niños y 2 adultos fueron asesinados.
El pasado 24 de mayo, un joven de 18 años entró con un arma en la escuela primaria Robb Elementary School de Uvalde, Texas (Estados Unidos), y acabó con la vida de 19 niños y dos adultos.
El asesino, a quien las autoridades han identificado como Salvador Ramos, fue abatido por la policía.
El P. Bruce, sacerdote paulista, director espiritual de caridades católicas en Texas y Misionero de la Misericordia nombrado por el Papa Francisco, sintió la llamada del Espíritu Santo y viajó hasta Uvalde, el pueblo donde tuvo lugar la masacre, para acompañar a las familias en el dolor.
"Pude confesar a la gente, recé con ellos y les acompañé en la parroquia del Sagrado Corazón durante una Misa que celebramos en Uvalde, como representante de los sacerdotes paulistas y como Misionero de la Misericordia", explicó el sacerdote a ACI Prensa.
El sacerdote contó que a esta parroquia pertenecían cuatro de los niños asesinados y una maestra, que también perdió la vida tras intentar proteger a sus alumnos.