El Obispo de Brownsville (Estados Unidos), Mons. Daniel Flores, denunció que las armas "son más fáciles de conseguir que la aspirina", luego que un hombre armado asesinó este martes 24 de mayo al menos a 19 niños y dos maestros en la escuela primaria Robb en Uvalde, Texas.
"Sacralizamos los instrumentos de la muerte y luego nos sorprendemos de que la muerte los use", señaló el Prelado, cuya diócesis se encuentra en el estado de Texas.
En su cuenta de Twitter, Mons. Flores escribió este miércoles: "No me digan que las armas no son el problema, la gente lo es. Estoy harto de escucharlo. La oscuridad primero se lleva a nuestros hijos y luego mata a nuestros hijos, usando las armas que son más fáciles de conseguir que la aspirina".
Mons. Salvatore Cordileone, Arzobispo de San Francisco, también se pronunció desde su cuenta de Twitter y dijo que el Obispo de Brownsville "tiene razón".
El Arzobispo de San Francisco señaló que "tiene que haber regulaciones sensatas para las armas, para ayudar a detener la pandemia de la violencia armada". El Prelado propuso "verificaciones de antecedentes más estrictas, restricciones en los AR-15 [rifle semiautomático usado en la masacre de la escuela primaria] y aumentar la edad de los compradores a 21" años.
Estas fueron dos de las muchas respuestas de los obispos católicos de los Estados Unidos a la masacre cometida por un hombre de 18 años, que disparó contra niños y maestros en la escuela primaria Robb en Uvalde, a unos 128 kilómetros al oeste de San Antonio. Entre las víctimas había estudiantes de diez años de edad.