VATICANO,
Al finalizar la Audiencia General de este miércoles 18 de mayo, el Papa Francisco dio un consejo especial para los recién casados, los jóvenes y a los ancianos y enfermos.
En primer lugar, el Santo Padre alentó a los jóvenes a "no tener miedo de poner sus energías al servicio del Evangelio, con el entusiasmo propio de su edad".
Además, el Papa Francisco exhortó a los matrimonios recién casados a formar familias que sean "lugares donde aprender a amar a Dios y al prójimo con serenidad y alegría".
Finalmente, el Papa sugirió a los ancianos y a los enfermos a ser "conscientes de que aportan una valiosa contribución a la sociedad con su sabiduría".
Previamente, el Santo Padre dedicó su catequesis al personaje bíblico de Job y destacó que la importancia de perseverar en la fe y en la oración a pesar de las dificultades y los sufrimientos de la vida.
"La parábola del libro de Job representa de forma dramática y ejemplar lo que en la vida sucede realmente. Es decir, que, sobre una persona, sobre una familia o sobre un pueblo se derriban pruebas demasiado pesadas, desproporcionadas respecto a la pequeñez y fragilidad humana", explicó el Papa.