Juan Carlos Liendo O'Connor, exjefe del servicio de inteligencia del Ejército y coronel en situación de retiro, relató cómo era la situación de terror y caos que enfrentó con coraje la mártir Aguchita, cuando los terroristas comunistas de Sendero Luminoso dominaban la zona y obligaban a las madres indígenas asháninkas a matar a sus hijos.
ACI Prensa conversó este viernes 6 de mayo con el también especialista en seguridad nacional, inteligencia y política internacional, sobre la situación que se vivía en la provincia de Chanchamayo, en la zona amazónica del departamento de Junín, cuando servía allí la religiosa María Agustina de Jesús Rivas López, Aguchita, asesinada por los terroristas de Sendero Luminoso en septiembre de 1990.
La religiosa será beatificada este sábado 7 de mayo en la localidad de La Florida, en la selva del Perú.
ADVERTENCIA: La crudeza del relato puede herir la sensibilidad del lector
Liendo, director de la revista Xauxa, contó que "en 1989, un año antes de la muerte de Aguchita, el ejército había logrado expulsar a los comités populares que existían en todo el departamento de Ayacucho y estos comités de Sendero Luminoso huyeron hacia la selva".
Ayacucho, a unos 560 kilómetros al sureste de Lima en la región andina del país, fue el lugar donde surgió Sendero Luminoso y el más afectado por el grupo terrorista que dejó decenas de miles de muertos en el país.