Ya son 100 los cardenales y obispos de todo el mundo que advierten del riesgo de cisma de la Iglesia en Alemania, debido al curso que sigue el polémico Camino Sinodal en el país europeo.
El Camino Sinodal es un controvertido proceso de varios años que comenzó en diciembre de 2019 y en el que participan obispos y laicos de Alemania para tratar temas como el ejercicio del "poder", la moral sexual, el sacerdocio y el papel de las mujeres en la Iglesia, temas sobre el que han expresado, públicamente y en diversas ocasiones, posturas contrarias a la doctrina católica.
El 11 de abril, poco más de 70 obispos, entre ellos los cardenales Francis Arinze, Raymond Burke, George Pell y Wilfred Napier, a quienes ahora se han sumado el italiano Camillo Ruini y el chino Joseph Zen-ze kiun, enviaron una "carta fraterna" a los obispos de Alemania para advertir del peligro de cisma.
Entre los 100 firmantes, están también un arzobispo argentino, dos uruguayos, dos brasileños, algunos de Hungría y también Ucrania, quienes se unen así a los prelados de Estados Unidos, Canadá, Tanzania y Camerún, entre otros.
En la carta, los obispos explican que lo que ocurre en la Iglesia Católica en un país puede influenciar a otros, por lo que manifiestan su "creciente preocupación acerca de la naturaleza del proceso del Camino Sinodal alemán en su conjunto y el contenido de sus diversos documentos".
"La seriedad de estas observaciones se desprende tanto de la confusión que el Camino Sinodal ha causado, y continúa causando, como del potencial para el cisma en la vida de la Iglesia en que derivará inevitablemente", alertan los obispos.