La publicación de la nueva constitución del Vaticano Praedicate evangelium no es necesariamente el final de la reforma de la curia y más adelante se podrían agregar nuevas oficinas, dijo el secretario de Estado Vaticano, Cardenal Pietro Parolin.
En una entrevista concedida a ACI Stampa –agencia en italiano del Grupo ACI– antes del viaje del Papa Francisco a Malta, el Purpurado habló acerca de la reforma de la Curia romana, el papel de la Secretaría de Estado después del lanzamiento de Praedicate evangelium y sobre la falta actual de personal diplomático en la Santa Sede.
En la primera parte de la entrevista el Cardenal se refirió a los esfuerzos de la Santa Sede para poner fin a la guerra entre Rusia y Ucrania. En ese sentido, en 2014 el Purpurado dijo que había la posibilidad de crear, dentro de la Secretaría de Estado, una oficina para supervisar los esfuerzos de mediación del Vaticano en los conflictos internacionales.
La Santa Sede se ha propuesto actuar como mediador entre Rusia y Ucrania. También ha buscado mediar en Venezuela, apoyó el proceso de paz en Colombia y sirvió como facilitador en las discusiones entre Cuba y Estados Unidos para restablecer los lazos diplomáticos.
Sin embargo, esta actividad de la diplomacia vaticana no condujo a la creación de una oficina específica, como pedía el Cardenal Parolin.
Para el secretario de Estado vaticano, sin embargo, "no es seguro que la reforma de la Curia acabe con la idea de una oficina de mediaciones pontificias. La Curia es un organismo vivo. Continúa, obviamente siempre siguiendo las indicaciones dadas por el Papa; pero, ¿cuántos institutos y entidades siempre se han agregado después de cada reforma?".