Y hablando de esto quisiera darles mis condolencias por sus colegas que han caído. Sean de la parte que sean, no interesa. Su trabajo es un trabajo por el bien común, y estos han caído al servicio del bien común, de la información. No los olvidamos, han sido valientes y rezo por ellos, para que el Señor les dé el premio por su trabajo.
Estos han sido los contactos tenidos hasta el momento.
O'Connel: ¿Cuál sería su mensaje al presidente Putin, si hubiese la posibilidad?
Papa Francisco: Los mensajes que he dado a todas las autoridades y es lo que hago públicamente yo. No tengo un doble lenguaje. Es siempre lo mismo. También creo que en su pregunta hay también duda sobre las guerras justas o injustas. Toda guerra nace de una injusticia siempre porque está el esquema de guerra, no hay un esquema de paz.
Por ejemplo: hacer inversiones para comprar armas. Dicen: 'Pero necesitamos defendernos'. Este es el esquema de guerra.
Cuando terminó la Segunda Guerra Mundial, todos han respirado el lema 'nunca a la guerra' y la paz. Comenzó una ola de trabajo por la paz, también con la buena voluntad de no hacer armas, las armas atómicas en ese momento, luego de Hiroshima y Nagasaki, había una gran y buena voluntad.
Setenta u ochenta años después hemos olvidado eso. Es así: el esquema de la guerra se impone. Tantas esperanzas en el trabajo de las Naciones Unidas en ese momento, pero el esquema de la guerra se ha impuesto otra vez. No podemos pensar en otro esquema porque ya no estamos habituados a pensar en el esquema de la paz.
Hubo varios grandes como Gandhi y varios otros que menciono al final de (la encíclica) Fratelli tutti, que han apostado por el esquema de la paz, pero somos tercos, tercos como humanidad. Estamos enamorados de las guerras, del espíritu de Caín.
No por gusto, al inicio de la Biblia está este problema: el espíritu 'cainista', de matar, en vez del espíritu de paz. '¡Padre, no se puede!'. Les digo una cosa personal, cuando fui en 2014 a Redipuglia y vi los nombres, lloré, en serio, lloré con amargura. Uno o dos años después, por el día de los fieles difuntos fui a celebrar a Anzio y vi a los muchachos que en el desembarco de Anzio cayeron allí. Estaban los nombres de todos los jóvenes y también allí lloré, en serio. Se llora sobre las tumbas.
Una cosa que respeto, porque es un problema político, pero cuando fue la conmemoración del desembarco de Normandía, los jefes de Estado se reunieron para conmemorarlo, pero no recuerdo que alguno haya hablado de los 30 mil jóvenes soldados que quedaron en las playas.
Se abrían los barcos, salían de ellos y eran ametrallados allí en las playas. La juventud no importa. Esto me hace pensar a mí, me da dolor, estoy adolorido por lo que sucede hoy. No aprendemos. Que el Señor tenga piedad de nosotros, de todos nosotros. ¡Todos somos culpables!
Matteo Bruni: Gracias Santidad. Estamos en este punto un poco ajustados por el tiempo.
Papa Francisco: Les agradezco mucho por su trabajo, la información, muchas gracias, espero volver a verlos en un próximo viaje, gracias por su paciencia, gracias por la información, y sigamos adelante, gracias. ¡Buen aterrizaje!
Dona a ACI Prensa
Si decides ayudarnos, ten la certeza que te lo agradeceremos de corazón.
Donar