REDACCION CENTRAL,
El gobernador de Idaho (Estados Unidos), Brad Little, firmó el 23 de marzo una ley que prohíbe los abortos al detectarse los latidos del corazón del feto, que puede ser tan temprano como a las seis semanas de embarazo.
El proyecto de ley, similar a la ley provida de Texas, recibió una votación mayoritaria en ambas cámaras estatales la semana pasada.
Según la nueva ley de Idaho, no se podrán realizar abortos una vez que se ha detectado actividad cardíaca embrionaria o fetal, y permite que los familiares del niño por nacer inicien acciones legales contra el proveedor médico que practica el aborto.
Sin embargo, el llamado proyecto de ley de "latidos cardíacos fetales" señala que hay excepciones en el caso de emergencias médicas, violación o incesto.
En una carta publicada tras la firma de la ley, Little escribió: "Me solidarizo con todos los habitantes de Idaho que buscan proteger la vida de los bebés no nacidos".
Algunos legisladores indicaron que la ley era necesaria para prohibir los abortos hasta que la Corte Suprema revoque el histórico fallo de Roe vs. Wade de 1973 –que legalizó el aborto en todo el país– y los estados puedan prohibir los abortos con aplicación pública y penal.