VATICANO,
En la catequesis de la Audiencia General de este miércoles 23 de marzo, el Papa Francisco destacó la importancia del testimonio de fe transmitido de los ancianos a los jóvenes, algo que no se encuentra en los libros o en internet.
Ante los fieles presentes en el Aula Pablo VI del Vaticano, el Santo Padre destacó el ejemplo de Moisés, que entrado en la vejez tuvo la lucidez de proclamar el nombre del Señor y transmitir la herencia de su vida con Dios a las nuevas generaciones.
Una herencia insustituible
A continuación, el Papa explicó que "una vejez a la cual le es concedida esta lucidez es un don valioso para la próxima generación. La escucha personal y directa del pasaje de la historia de fe vivida, con todos sus altibajos, es insustituible".
El Santo Padre defendió el valor de esta transmisión, y aseguró que no es lo mismo leerlo en los libros o buscarlo en internet, ya que "la narración directa, de persona a persona, tiene tonos y modos de comunicación que ningún otro medio puede sustituir.