VATICANO,
El Vaticano difundió este miércoles el mensaje del Papa Francisco para la Campaña de Fraternidad 2022, que celebra la Iglesia en Brasil por Cuaresma, en el que destacó la responsabilidad de los gobiernos "en la tarea de ayudar a las familias en la educación de sus hijos, garantizando el acceso a la escuela para todos", así como la necesidad de que se reconozca y se valore "la importante misión de la Iglesia en el ámbito educativo".
Al comienzo del mensaje, el Papa Francisco explicó que al iniciar el camino cuaresmal "nos disponemos a escuchar la llamada de Dios, que quiere conducirnos, a través de las prácticas penitenciales del ayuno, la limosna y la oración, a un encuentro personal y renovador con el Resucitado, en quien tenemos la verdadera vida y del que tenemos que ser fieles testigos".
A continuación, señaló que la Iglesia en Brasil eligió el tema "Fraternidad y Educación" para la campaña de este año, algo que para el Santo Padre es "fundamental para la valoración del ser humano en su totalidad, evitando la cultura del descarte, que coloca a los más vulnerables al margen de la sociedad y despertando la importancia del cuidado de la creación".
"De hecho, mirando a la sociedad actual, es muy evidente la necesidad urgente de adoptar acciones transformadoras en el campo de la educación para tener una educación que promueva la fraternidad universal y el humanismo integral", dijo el Papa Francisco.
Asimismo, el Santo Padre destacó la responsabilidad de los gobiernos "en la tarea de ayudar a las familias en la educación de sus hijos, garantizando el acceso a la escuela para todos", así como la necesidad de que se reconozca y se valore "la importante misión de la Iglesia en el ámbito educativo".
El Papa Francisco recordó también las palabras de su discurso de marzo de 2021, en el que explicó que "las religiones siempre han tenido una estrecha relación con la educación, acompañando las actividades religiosas con las educativas, escolares y académicas. Como en el pasado, también hoy queremos, con la sabiduría y la humanidad de nuestras tradiciones religiosas, ser un estímulo para una renovada acción educativa que pueda hacer crecer la fraternidad universal en el mundo".