El Gobierno de Costa Rica autorizó las procesiones de Semana Santa, luego que los obispos católicos insistieran en su solicitud para realizarlas, ante el levantamiento de restricciones impuestas a causa de la pandemia del COVID-19.
Los obispos de Costa Rica informaron el 28 de febrero que "con la nueva disposición del Ministerio de Salud, que lleva la rúbrica del Ministro de Salud, Dr. Daniel Salas Peraza, a partir del 1 de abril de 2022 se podrán realizar procesiones religiosas, las cuales estaban prohibidas como parte de las medidas que se habían dispuesto producto de la pandemia generada por el COVID-19".
Los prelados costarricenses habían solicitado el 22 de febrero que se permitan las procesiones, pero en la rueda de prensa del 23 de febrero, en la que el presidente Carlos Alvarado anunció el levantamiento de restricciones, no se incluyó la autorización para estos eventos religiosos.
Ante la insistencia de los obispos, el Gobierno finalmente dio su aprobación para las procesiones.
En su comunicado del 28 de febrero, los obispos recordaron que fue la Conferencia Episcopal de Costa Rica la que en marzo de 2020 "había ordenado el cierre de templos y, para la Semana Santa de ese año, dispuso la no realización de procesiones".
"Para la Iglesia siempre el don sagrado de la vida está por encima de cualquier derecho y deber de resguardo. En eso nos hemos comprometido y sabemos que los fieles también han acatado las disposiciones para cuidarnos unos a otros", indicaron entonces.