VATICANO,
La inauguración del encuentro "El Mediterráneo, frontera de paz", coincidió con el estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania, donde decenas de civiles y soldados ya han perdido la vida.
Desde la ciudad italiana de Florencia, donde tiene lugar el encuentro que contará con la presencia del Papa Francisco, el presidente del Consejo de Conferencias Episcopales Europeas (CCEE), Mons. Gintaras Grušas, hizo un sentido llamado a la paz en nombre de los obispos europeos.
En el comunicado, Mons. Gintaras Grušas, también Arzobispo de Vilnius, señaló que "las Iglesias de Europa condenan enérgicamente lo ocurrido esta noche en Ucrania".
"Debemos actuar juntos y con determinación para poner fin inmediatamente a los ataques rusos y hacer todo lo posible para proteger a las mujeres, los hombres y los niños inocentes: ¡en nombre de Dios, deténganse ahora!", pidieron los obispos.
A continuación, explicaron que "la comunidad internacional, y en particular la Unión Europea, no debe dejar de lado ningún intento para detener este conflicto, para que las armas den paso al diálogo y a las negociaciones, para que se defienda el derecho internacional y la independencia y soberanía territorial de Ucrania. Por el fin de una guerra que inevitablemente se extendería de Ucrania a los estados vecinos y se convertiría en una amenaza para toda Europa."
"Los obispos europeos y las comunidades cristianas rezan por las víctimas de este conflicto y por sus familias, están cerca de los que sufren estos actos de violencia", señalaron.