Mons. Rubén Darío Jaramillo, Obispo de Buenaventura (Colombia) bendijo esta ciudad portuaria desde un helicóptero para pedir el fin de la violencia y de la pobreza que sufre la población.
Según indicó la Diócesis de Buenaventura a ACI Prensa, el Prelado bendijo la ciudad el viernes 4 de febrero por la tarde, en un sobrevuelo que se inició en el aeropuerto de Buenaventura y que duró aproximadamente una hora y media.
El Obispo roció el agua bendita por los lugares por donde pasaba e hizo en repetidas ocasiones la señal de la cruz con un crucifijo.
En un video compartido por la Diócesis de Buenaventura, Mons. Jaramillo dijo que la bendición la hizo sobre "la ciudad, los ríos, los esteros, la población" para pedir "a Dios que bendiga nuestro puerto, nos ayude a las autoridades y a todos los que construyen la paz y hacen la buena voluntad de buscar siempre el bien de toda la comunidad".
"Que venga la bendición de Dios e ilumine y ayude a aquellas personas que usan la violencia para que desistan de sus intereses, para que veamos que la vida es sagrada", dijo el Prelado en declaraciones a medios locales.
"Queremos aportar y ayudar para que podamos regresar a los campesinos adonde siempre han estado viviendo. No pueden ser sacados a través de la amenaza o de las armas", agregó.