El 27 de enero, líderes de la Iglesia Católica y de otras religiones se reunieron en Auschwitz-Birkenau (Polonia), para conmemorar el 77 aniversario de la liberación del antiguo campo de concentración nazi donde murieron más de 1,1 millones de personas entre 1940 y 1945.
En el encuentro transmitido en vivo, Mons. Piotr Greger, Obispo Auxiliar de Bielsko-Zywiec, al sur de Polonia, rezó en Auschwitz II-Birkenau, el más grande de los campos de concentración que formaron el complejo de Auschwitz.
En el momento de oración ecuménico, también participaron el rabino jefe de Polonia, Michael Schudrich, el obispo luterano polaco Adrian Korczago, y el hieromonje Aleksander Mokriszczew, de la Iglesia ortodoxa autocéfala polaca.
El rezo formó parte del programa del evento y se realizó en el auditorio del Centro Internacional para la Educación sobre Auschwitz y el Holocausto.
Debido a la pandemia del COVID-19, solo asistió un pequeño número de invitados, entre ellos, algunos sobrevivientes del Holocausto que compartieron sus historias y reflexiones.
Una de las sobrevivientes, la escritora Halina Birenbaum, de 92 años, dijo que "en todos los largos años desde mi liberación de estos infiernos en la tierra, no he dejado de contar lo que viví entonces, de lo que fui víctima y testigo presencial".