La Corte Europea de Derechos Humanos consideró inadmisible y rechazó un caso presentado por un activista progay de Irlanda del Norte, que afirma que una pastelería lo discriminó al negarse a hacer un pastel con un mensaje de apoyo al "matrimonio" homosexual.
En mayo de 2014 Gareth Lee ordenó un pastel en la Ashers Bakery, ubicada en el condado Antrim, en Irlanda del Norte. El activista pidió que el pastel tuviera un cartel que dijera "apoya el matrimonio gay", un mensaje al que los dueños del lugar, los esposos McArthur, se oponen en razón de su fe cristiana.
La Corte Suprema del Reino Unido llegó a un veredicto unánime a favor de los MacArthur en 2018, luego que una corte menor falló en contra de los pasteleros. Lee apeló entonces a la Corte Europea de Derechos Humanos, suscitando así un caso contra el Estado británico.
El 6 de enero, la Corte Europea determinó que el caso de Lee es inadmisible porque "no agotó los recursos internos".
La Corte Europea indicó que Lee no presentó sus argumentos basado en la Convención Europea de Derechos Humanos con las cortes del Reino Unido: "Al basarse solo en la ley local, el solicitante ha privado a las cortes locales de la oportunidad de dirigirse a los argumentos de la Convención, y en vez de eso ha solicitado a la corte usurpar el papel de las cortes locales".
Simon Calvert, vocero de The Christian Institute, organización benéfica no confesional que ha apoyado a los McArthur desde 2014, dijo que la decisión de la Corte Europea "es el resultado correcto".