VATICANO,
La presidencia de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) publicó este 3 de enero un importante mensaje para destacar a los jóvenes y a los padres la importancia de estudiar religión en la escuela, una materia que es optativa en los centros públicos y algunos privados, y sólo forma parte del plan de estudios de las escuelas privadas católicas.
En la misiva firmada el pasado 17 de diciembre, pero difundida este lunes, los obispos italianos alentaron a los jóvenes a elegir estudiar la materia de religión católica (conocida con las siglas IRC, por su significado en italiano "Insegnamento della religione cattolica") porque "por su naturaleza, fomenta el diálogo y la comparación entre personas y experiencias diferentes".
"Creemos que el valor del diálogo pacífico y auténtico con todo el mundo debe ser un objetivo importante que debemos alcanzar juntos", por lo que el Episcopado animó a utilizar este espacio formativo que permita "desarrollar un sentido positivo de sí mismo y experimentar relaciones pacíficas con los demás, incluidos los de diferentes tradiciones culturales y religiosas".
Además, la carta de los obispos subraya que "en el actual contexto multicultural, a través de esta propuesta se promueve la participación de los estudiantes en un diálogo auténtico y constructivo, educándolos para el ejercicio de su libertad en una perspectiva de justicia y paz".
En esta línea, la presidencia de la CEI recordó el discurso pronunciado por el Papa Francisco en la Sala Clementina del Palacio Apostólico del Vaticano, con motivo del encuentro con representantes de diferentes religiones, sobre el tema "Religiones y Educación: Hacia un Pacto Global en Educación".
"Desde siempre las religiones han tenido una estrecha relación con la educación, acompañando las actividades religiosas con las educativas, docentes y académicas. Como en el pasado también hoy, con la sabiduría y la humanidad de nuestras tradiciones religiosas, queremos estimular una renovada acción educativa que pueda hacer crecer en el mundo la fraternidad universal", indicó entonces el Papa.