El Cardenal George Pell dice que no alberga ninguna mala voluntad hacia el hombre cuya acusación de agresión sexual lo envió a prisión durante 13 meses, pero aún quiere saber por qué el Vaticano envió más de dos millones de dólares a Australia durante su juicio.
El Cardenal Pell, ex Arzobispo de Sydney y prefecto emérito de la Secretaría de Economía del Vaticano, fue liberado de prisión el 7 de abril de 2020, luego de que el Tribunal Superior de Australia dictaminó por unanimidad que el jurado que lo condenó el 11 de diciembre de 2018 no debería haberlo encontrado culpable más allá de toda duda razonable.
En diciembre de 2018 el Purpurado fue declarado culpable de agredir sexualmente a dos adolescentes del coro en 1996 -cuando era Arzobispo de Melbourne-, una acusación que siempre había negado. El Cardenal fue puesto en libertad 13 meses después, cuando cumplía una sentencia de seis años.
Desde que fue liberado, el Cardenal Pell ha publicado sus diarios de prisión en una serie de volúmenes. Su último, "Diario de Prisión, Volumen 3: El Tribunal Supremo libera a un hombre inocente", fue publicado por Ignatius Press el 2 de noviembre de 2021.
Los libros contienen las reflexiones del Purpurado sobre su tiempo en la cárcel, que transcurrió principalmente en régimen de aislamiento. Ahora divide su tiempo entre Roma y Sydney. El Cardenal habló con CNA -agencia en inglés del Grupo ACI- a principios de diciembre mientras promocionaba su libro en Estados Unidos.
"Tenemos una pregunta básica sin respuesta", dijo el Cardenal Pell a CNA en una entrevista telefónica. "Sabemos -esto ha sido confirmado por el Cardenal [Angelo] Becciu-, que 2.300.000 de dólares australianos fueron enviados desde la Secretaría de Estado del Vaticano a Australia".