El Papa Francisco advirtió este 11 de diciembre sobre los peligros y desafíos para la vida consagrada, al tiempo que recordó la importancia de recordar las "raíces", pues "esto nos hace crecer".
En una audiencia con los participantes de la Plenaria de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, el Santo Padre subrayó que para la vida consagrada "es decisivo" el "centrarse en el don de Dios, en la gratuidad de su llamada, en la fuerza transformadora de su Palabra y de su Espíritu".
El Papa subrayó la importancia de una "memoria 'deuteronómica'" para que los consagrados miren "el futuro con confianza".
"¿Por qué digo memoria deuteronómica? Porque es muy importante recordar. Ese mensaje de Deuteronomio: 'Recuerda Israel, recuerda'. Ese recuerdo de la historia, de la propia historia, del propio instituto. Ese recuerdo de las raíces. Y esto nos hace crecer", dijo.
El Santo Padre advirtió que "cuando perdemos la memoria, ese recuerdo de las maravillas que Dios ha hecho en la Iglesia, en nuestro instituto, en mi vida - todos pueden decir -, perdemos fuerzas y no podremos dar vida. Por esto digo memoria deuteronómica".
El Papa Francisco dijo a los participantes de la Plenaria de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica que "conozco la multiplicidad de situaciones con las que tienen que lidiar todos los días. Situaciones muchas veces complejas, que requieren ser estudiadas en profundidad, en su historia, en diálogo con los Superiores de los institutos y con los Pastores".