Decenas de católicos que viajaban para participar en un matrimonio, murieron ahogados en el río Enziu, en Kenia, luego de que el autobús que los transportaba cayera en un río.
El 4 de diciembre, un grupo de personas emprendieron un viaje en autobús desde el Seminario Menor de San José en dirección a la Parroquia de San José Nuu, en la Diócesis de Kitui (Kenia), que sirve a más de 230 mil católicos, para participar en el matrimonio del hermano de un sacerdote diocesano.
Según los medios locales, para continuar con su trayecto, el conductor del vehículo intentó cruzar un puente que había sido afectado por el aumento del caudal del río Enziu, y el resultado fue el hundimiento del vehículo y el fallecimiento de 33 personas, incluidos menores.
El conductor del autobús, Fray Stephen Kang'ethe, miembro de la Orden de los Hermanos de San Pedro Claver, habría esperado dos horas antes de decidir realizar el peligroso recorrido. Según un testigo, el religioso se habría animado a cruzar luego de que otros vehículos lograran hacerlo con éxito.
Entre los fallecidos se encuentran los religiosos Fray Stephen Kang'ethe y Fray Kenneth Wanzala Okinda, 20 miembros del coro de la Parroquia Santa Cecilia, y varias niñas que llevaban flores.
Además, murieron dos hijas y dos nietos de la pareja que recibió el sacramento del Matrimonio; junto a 11 miembros de la familia del P. Benson Kityambyu, el hermano del novio.