VATICANO,
El Papa Francisco lamentó "con vergüenza" las acciones y decisiones de la Iglesia Católica basadas "en la sed de ganancias y de poder" y pidió perdón "por los errores que han cometido tantos católicos".
Así lo dijo el Santo Padre este 4 de diciembre durante su visita a Atenas, la capital de Grecia, al encontrar a una delegación de la Iglesia Ortodoxa autocéfala griega presidida por el Arzobispo ortodoxo, Su Beatitud Ieronymos II.
Después de reunirse en privado con el primado de la Iglesia Ortodoxa autocéfala de Grecia en la sede del arzobispado ortodoxo, el Pontífice señaló que visita "como peregrino, con gran respeto y humildad, para renovar esa comunión apostólica y alimentar la caridad fraterna".
El Santo Padre admitió "con vergüenza -lo reconozco por la Iglesia católica- acciones y decisiones que tienen poco o nada que ver con Jesús y con el Evangelio, basadas más bien en la sed de ganancias y de poder, han hecho marchitar la comunión".
"Hoy aquí siento la necesidad de renovar la súplica de perdón a Dios y a los hermanos por los errores que han cometido tantos católicos. Pero es un gran consuelo la certeza de saber que nuestras raíces son apostólicas y que, no obstante las distorsiones del tiempo, la planta de Dios crece y da frutos en el mismo Espíritu. Y es una gracia que reconozcamos los unos los frutos de los otros y que juntos agradezcamos al Señor por ello", afirmó el Papa.
En esta línea, el Santo Padre recordó que en abril de 2016 visitó junto al Patriarca Ecuménico Bartolomeo y el Arzobispo de Atenas, Ieronymos II, el campo de refugiados Morias, en la isla griega de Lesbos.