Durante el rezo del ángelus el Papa Francisco animó a no dejarnos absorber por "las dificultades, los sufrimientos y derrotas de la vida" que pueden llevarnos a ser "cristianos adormecidos". Para evitarlo alentó a permanecer "vigilantes en la oración" y a repetir en este tiempo de Adviento, junto a la Virgen, "Ven, Señor Jesús".
El Papa Francisco habló durante el rezo del ángelus sobre el primer domingo de Adviento que se celebra hoy 28 de noviembre.
En el Evangelio de la liturgia de hoy, se habla de la venida del Señor al final de los tiempos. "Jesús anuncia acontecimientos desoladores y tribulaciones, pero precisamente en este punto nos invita a no tener miedo. ¿Por qué? ¿Porque todo irá bien? No, sino porque Él vendrá. Jesús volverá. Lo ha prometido", aseguró el Papa.
Y recordó que "precisamente en los momentos en que todo parece acabado, el Señor viene a salvarnos" y animó a "esperarlo con alegría incluso en medio de las tribulaciones, en las crisis de la vida y en los dramas de la historia".
El Papa afirmó que en el Evangelio el Señor explica cómo "no dejarse absorber por las dificultades, los sufrimientos y las derrotas", que es a través de la "vigilancia" que según el Papa Francisco "está ligada a la atención" y significa no permitir "que tu corazón se vuelva perezoso y que tu vida espiritual se ablande en la mediocridad".
Por eso alertó del peligro de ser un "cristiano adormecido", "sin ímpetu espiritual, sin ardor en la oración, sin entusiasmo por la misión, sin pasión por el Evangelio".