La Arquidiócesis de Managua (Nicaragua), publicó el 24 de noviembre las medidas que deberán seguir los fieles para participar en las próximas celebraciones marianas y navideñas, entre las que está la suspensión de las procesiones y actividades masivas para evitar contagios de COVID-19.
En el comunicado, el Cardenal Leopoldo José Brenes Solórzano, Arzobispo Metropolitano de Managua, invocó a los fieles a celebrar las próximas festividades marianas, Navidad y Año Nuevo, con una "actitud responsable" y "creativa devoción" para "cuidar la salud y vida" de todos.
El Purpurado destacó la profunda devoción de los cristianos, en especial del pueblo de Nicaragua, "a la Madre de Cristo y Madre Nuestra, la Inmaculada Siempre Virgen María", y la variedad de expresiones de fe y tradiciones católicas que se viven en el país en tiempos navideños.
La devoción a María "es un distintivo de la fe católica que ha enriquecido varios aspectos de la piedad de nuestro pueblo cristiano, que a lo largo de los siglos ha sabido expresar de múltiples formas la alegría y la esperanza que representa incluso en tiempos difíciles la devoción mariana nicaragüense", dijo.
No obstante, tomando en cuenta que el proceso de vacunación contra el COVID-19 aún está en curso en Nicaragua, el Purpurado animó a participar en el control de la enfermedad, "que ha dejado dolor y luto en nuestras familias", siguiendo las pautas y recomendaciones establecidas por la Iglesia local en 2020, año en que inició la pandemia.
Sobre las fiestas marianas, llamó a realizar "la Novena a La Purísima Concepción de María y al Niño Dios" en "pequeños grupos" o "un ambiente especialmente familiar"; y los animó a rezar "por nuestra patria y una Iglesia más sinodal y misionera". Asimismo, recomendó "el uso del protocolo básico publicado el 2 de octubre del 2020" para la asistencia a las iglesias.