VATICANO,
La explotación laboral infantil es una plaga que debe ser erradicada; así lo expresó el Papa Francisco este viernes 19 de noviembre en la audiencia que concedió a los miembros de la Conferencia Internacional "Erradicar el trabajo infantil, construir un futuro mejor", promovida por la Comisión Vaticana COVID 19.
En su discurso, el Santo Padre señaló que "la plaga de la explotación laboral de los niños es de particular importancia para el presente y para el futuro de nuestra humanidad".
"El modo en que nos relacionamos con los niños, la medida en que respetamos su innata dignidad humana y sus derechos fundamentales, expresan qué tipo de adultos somos y queremos ser, y qué tipo de sociedad queremos construir".
Afirmó que "nos deja atónitos y perturbados el hecho de que, en las economías contemporáneas, cuyas actividades productivas se valen de las innovaciones tecnológicas, persiste en todas las partes del globo el empleo de niños en actividades laborales. Esto pone en riesgo su salud, su bienestar psíquico-físico y les priva del derecho a la formación y a vivir la infancia con alegría y serenidad. La pandemia ha agravado la situación".
El Papa distinguió entre el trabajo infantil y las tareas domésticas de los menores en el entorno familiar. Explicó que "el trabajo infantil no debe confundirse con las pequeñas tareas domésticas que los niños, en su tiempo libre y en función de su edad, pueden desempeñar en el ámbito de la vida familiar, para ayudar a los padres, a los hermanos y a los abuelos o a otros miembros de la comunidad".
"Estas actividades son favorables para su desarrollo porque permiten poner a prueba sus capacidades y les hace crecer en conocimiento y responsabilidad", afirmó.