A pie o en auto, más de 50 mil fieles acompañaron por las calles de Paranaguá (Brasil) a Nuestra Señora del Rocío la tarde del lunes 15 de noviembre en la 208 procesión solemne en honor a la patrona de Paraná.
El rector del Santuario Estatal de Nossa Senhora do Rocío, P. Dirson Gonçalves, resaltó que fue hermoso ver a la "gran multitud que acompañó la solemne procesión, muchos más a pie que en coche" y remarcó que este acto fue "una gran demostración de fe y alegría".
La procesión partió a las 4 de la tarde del Santuário do Rocio hacia la Catedral Diocesana de Nossa Senhora do Rosário, donde muchos devotos decidieron hacer el viaje a pie para pagar la promesa a la Virgen.
Juliana dos Santos Albuquerque, de 18 años, quien participó por primera vez en la procesión, indicó que nunca fue muy religiosa. "No solía ir a la iglesia, pero a principios de año pasé por una situación muy difícil", relató.
"Mi padre tenía COVID-19 y estaba muy mal. En tiempos difíciles, tendemos a aferrarnos a Dios y eso es lo que me pasó a mí", remarcó.
Dos Santos señaló que durante "los 28 días que estuvo hospitalizado", su padre comenzó "a acudir al Santuario del Rocío y a pedirle a Nuestra Señora del Rocío por su curación".