Grupos y activistas provida en Irlanda resaltaron la importancia de preservar el llamado período de espera de tres días antes de realizar un aborto, pues los nuevos datos muestran que aproximadamente 1.500 mujeres en el país decidieron no someterse a esta práctica después de la consulta inicial.
"Mi principal preocupación aquí es asegurar que las mujeres y los bebés estén protegidos y apoyados", dijo Carol Nolan, diputada independiente del Dáil de Laois-Offaly, quien buscó la información en una pregunta parlamentaria.
Nolan acusó tanto al actual ministro de Salud, Stephen Donnelly, miembro del Fianna Fáil; como a su predecesor, de tener "una especie de actitud fría hacia quienes buscan poner el énfasis en la necesidad de reducir los abortos en lugar de promoverlos".
"No es aceptable y seguiré luchando contra ello. Podemos y debemos hacer lo mejor por las mujeres y sus bebés", remarcó.
En una respuesta del 5 de noviembre a la pregunta parlamentaria, los funcionarios estatales informaron que 8.057 mujeres en la República de Irlanda hicieron una consulta inicial para realizarse un aborto. Sin embargo, solo 6.577 mujeres se sometieron a esta práctica, lo que significa que casi 1.500 desistieron durante el periodo de espera.
"Esta información indica que hay una proporción considerable de mujeres que cambian de opinión entre la primera consulta, cuando hablan sobre el aborto con su médico de cabecera, y la práctica del aborto", dijo Eilis Mulroy, del grupo Pro-Life Campaign, con sede en Irlanda.