Jordi Sabaté es un hombre que desde hace siete años sufre esclerosis lateral amiotrófica (ELA). Le diagnosticaron esta enfermedad cuando tenía 30 años.
Desde entonces ha mostrado sus ganas de vivir a través de las redes sociales, en especial después de que se aprobó en España la ley de la eutanasia, que entró en vigor en junio de 2021.
El pasado 10 de noviembre una trabajadora social visitó al joven y, según explicó a través de su cuenta de Twitter, le preguntó por sus voluntades, "por si algún día estoy enchufado a una máquina o me alimento artificialmente. Es decir, como estoy ahora. No era ciega. Luego me ha ofrecido la eutanasia. ASCO".
El presidente de la Asociación de Bioética y Ética Médica, Luis Miguel Pastor, explicó al diario ABC que "la eutanasia no es una opción más que ofrece el médico pese a que es probable que ese sea el efecto que tenga, al considerarse un derecho. Vamos a encontrarnos con esta situación muchas veces".
Además Pastor explicó que ni en la ley de eutanasia ni en el llamado "manual de buenas prácticas", que detalla aspectos concretos sobre la aplicación de la esta legislación, establece que sean los profesionales los que deben informar sobre la solicitud de la eutanasia.