VATICANO,
Durante el rezo del Ángelus dominical el Papa Francisco invitó a "fundar la vida sobre la Palabra de Dios" porque lo único que permanecerá es la caridad, el amor, el bien que "permanece siempre" y no las cosas transitorias como el dinero, el éxito, la apariencia o el bienestar físico.
"Y nosotros, ¿en qué estamos invirtiendo la vida? ¿En cosas que pasan, como el dinero, el éxito, la apariencia, el bienestar físico? De estas cosas no nos llevaremos nada ¿Estamos apegados a las cosas terrenas como si tuviéramos que vivir aquí para siempre?", invitó a cuestionarnos el Santo Padre este 14 de noviembre.
En esta línea, el Papa recordó la enseñanza de San Pablo "la caridad no pasará jamás" y añadió que "quien hace el bien invierte en la eternidad".
"Cuando vemos una persona generosa y servicial, apacible, paciente, que no es envidiosa, no critica, no se jacta, no se hincha de orgullo, no falta al respeto, esta es una persona que construye el Cielo en la tierra. Quizá no tenga visibilidad, no haga carrera, no será noticia en los periódicos y, sin embargo, lo que hace no se perderá. Porque el bien nunca se pierde, el bien permanece para siempre", advirtió.
De este modo, el Santo Padre dijo que que se trata de "un mensaje precioso para nosotros, para orientarnos en las decisiones importantes de la vida" para pensar "¿en qué conviene invertir la vida? ¿En lo que es transitorio, o en las palabras del Señor, que permanecen para siempre? Evidentemente, en estas".
Sin embargo, el Papa reconoció que "no es fácil, de hecho, las cosas que caen bajo nuestros sentidos y nos dan satisfacción inmediata nos atraen, mientras que las palabras del Señor, aunque son hermosas, van más allá de lo inmediato y requieren paciencia".