BUENOS AIRES,
– Unos veinte argentinos se convirtieron en noticia al decidir viajar en peregrinación a Tierra Santa para vivir ahí el Triduo Pascual.
En compañía del sacerdote Gustavo Jamut OMV, de la parroquia porteña de San Roque, los peregrinos desafiaron las noticias de los diarios con la esperanza de que más cristianos se animen a regresar a los santos lugares. Y es que con la crisis de violencia en Medio Oriente, las peregrinaciones a Tierra Santa son cada vez más escasas.
El Artemio Vitores OFM, superior del Convento Madre de San Salvador, que funciona como sede de la Custodia de Tierra Santa a Jerusalén, explicó que “a pesar de las noticias alarmistas, la situación está tranquila. Es verdad que, en teoría, siempre puede haber algún problema, pero en realidad todo está en calma”.
El último viernes, el padre Vitores participó como siempre del vía crucis por las calles de Jerusalén y sostiene que “ha sido uno de los viernes que más gente había, alrededor de 500 personas. Todo estaba tranquilo. Los frailes también hicimos la peregrinación a Betania y a los santuarios del Monte de los Olivos y todo fue normal, sin ningún problema”.
Los argentinos permanecerán diez días en Tierra Santa, y tendrán como lema una frase del Evangelio de Marcos: “¿No ardía nuestro corazón mientras nos hablaba en el camino y nos explicaba las Escrituras?”.
Serán recibidos por los franciscanos, se alojarán en la Residencia Casa Nova de Jerusalén, visitarán el Monte de los Olivos, el lugar de la Ascención de Jesús, la Gruta de Getsemaní, la basílica de la Agonía y la tumba de la Santísima Virgen.