REDACCION CENTRAL,
El día miércoles 27 de octubre la defensora del pueblo de Bolivia, Nadia Cruz, junto a funcionarios de su entidad y activistas en favor del aborto, vandalizaron la sede de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) en La Paz.
La movilización se realizó después de que algunas instituciones gubernamentales y prensa, incluida la extranjera, denunciaran que la Iglesia Católica en Bolivia ha obligado o intervenido para que una niña de 11 años, embarazada producto de una violación, rechace abortar, continúe con la gestación y sea trasladada a un albergue.
Varias organizaciones intentaron que la menor se realice el aborto; sin embargo, la niña y su madre se opusieron.
El sábado 23 de octubre, con una carta escrita a mano, la niña desistió formalmente de proseguir con el aborto y fue dada de alta el martes 26 de octubre. Luego, la menor fue trasladada a un albergue dirigido por la Iglesia Católica en Santa Cruz de la Sierra, por decisión de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia.
Desde entonces, la acción caritativa del clero boliviano fue respondida con ataques y acusaciones de una supuesta injerencia en las decisiones de la familia de la menor.
Según se observa en las imágenes del 27 de octubre, los exteriores de la sede episcopal fueron pintados con graffitis y se pegaron pancartas con varios mensajes proaborto.