Líderes de organizaciones a favor de la vida criticaron este 6 de octubre a un juez federal que ordenó detener la ley provida "Latidos del Corazón", que salvó la vida de casi 5 mil bebés en el vientre materno en Texas, desde que entró en vigencia hace un mes.
El 1 de septiembre de 2021 entró en vigor La Ley de Latidos del Corazón de Texas (SB 8), norma jurídica que exige que los médicos busquen un latido fetal antes de realizar un aborto y en caso se detecte, que puede ser tan temprano como a las seis semanas de embarazo, el aborto queda prohibido por ley, excepto en emergencias médicas.
La ley, que restringe la mayoría de los abortos en el estado, se aplica a través de demandas civiles privadas contra quienes realizan o ayudan en abortos ilegales, incluidos los que brindan asistencia financiera. Las demandas exitosas pueden generar al menos 10 mil dólares en juicios exitosos.
El 6 de septiembre, el juez Robert Pitman, del Distrito Oeste de Texas, que cubre todos los condados desde San Antonio, Austin, Uvalde y Del Río, ordenó detener la aplicación de la Ley de Latidos del Corazón por parte del estado.
Cabe destacar que la Administración del presidente Joe Biden había presentado una queja donde solicitó una orden de restricción temporal sobre el estado, o cualquier persona que presentara una demanda bajo tal ley.
Si bien Pitman no emitirá una orden judicial sobre futuras demandas privadas, su fallo detuvo cualquier acción privada bajo esta ley, "en la medida" en que "requeriría una acción estatal que ahora está prohibida".