VATICANO,
El Papa Francisco expresó su tristeza y dolor por el trauma que han sufrido las numerosas víctimas de abusos sexuales en la Iglesia de Francia.
Así lo dijo el Santo Padre durante la Audiencia General de este miércoles 6 de octubre al saludar a los fieles de lengua francesa y recordar la publicación de los resultados un informe publicado por la comisión independiente sobre los abusos en la iglesia católica en Francia (CIASE) que reveló que desde 1950 unos 330 mil menores fueron víctimas de abusos en ese país por sacerdotes, religiosos o laicos en ambiente religioso.
En esta línea, el Papa recordó que la Conferencia Episcopal Francesa, la conferencia de los religiosos y religiosas, recibió el 5 de octubre el informe de la comisión independiente sobre los abusos sexuales en la iglesia católica en Francia (CIASE) "encargada de evaluar la amplitud del fenómeno de las agresiones sexuales y la violencia contra los menores a partir de 1950".
"Las cifras son, por desgracia, considerables. Me gustaría expresar a las víctimas mi tristeza y dolor por el trauma que han sufrido. Y también mi vergüenza, nuestra vergüenza, mi vergüenza por el hecho de que la Iglesia, durante demasiado tiempo, no les haya colocado en el centro de sus preocupaciones asegurándoles mis oraciones", lamentó el Papa.
Por ello, el Santo Padre señaló "rezo y rezamos todos juntos: a ti Señor la gloria, a nosotros la vergüenza. Este es el momento de la vergüenza. Animo a los obispos, y a ustedes queridos hermanos que han venido a compartir este momento... Animo a los obispos, a los superiores y a los religiosos a que sigan haciendo todo lo posible para que no se repitan tragedias similares".
Asimismo, el Papa aseguró a los sacerdotes de Francia "mi cercanía y mi apoyo paternal ante esta prueba, que es dura pero saludable, e invito a los católicos franceses a asumir sus responsabilidades para que la Iglesia sea un hogar seguro para todos".