La Catedral de Piura, en el norte del Perú, se ilumina de morado durante el mes de octubre por dos importantes devociones: El Señor de los Milagros y el Señor Cautivo de Ayabaca.
"Con el fin de animarnos a vivir este tiempo especial de conversión, oración y caridad, la Basílica Catedral de Piura se ha iluminado con el característico color morado, propio de este tiempo, gracias a un novedoso sistema de luces que ilumina su fachada y sus torres", indica una nota del Arzobispado de Piura.
Del mismo modo, los integrantes de la Hermandad del Señor de Los Milagros han adornado el centro histórico y las principales avenidas y calles de Piura con banderines morados.
El Arzobispo de Piura, Mons. José Antonio Eguren, afirmó al respecto que "a veces creemos que frente al mal Dios no habla, se queda mudo, no actúa, no interviene, pero no es así. A toda la fuerza negativa y disgregadora del mal, Dios ha respondido en la Cruz con toda la mansa omnipotencia de su amor misericordioso".
"Frente al mal, fruto del pecado, Dios no se ha quedado callado, ha hablado y sigue hablando con su amor crucificado", aseguró.
Por ello, "frente a las sagradas imágenes del Señor Cautivo y del Señor de los Milagros podemos exclamar llenos de confianza: Señor tú eres nuestra única y verdadera esperanza. Señor sánanos de la pandemia, y en las actuales circunstancias que vivimos, une, defiende y sana, a nuestra amada Patria".