El párroco de la iglesia San Pío X, en la isla La Palma, logró salvar el Santísimo de la amenaza del volcán Cumbre Vieja, que tras su erupción va dejando 400 edificios desaparecidos y más de 5.700 personas desalojadas.
El domingo 19 de septiembre entró en erupción el volcán Cumbre Vieja, ubicado en la isla La Palma, Canarias (España), devastando la ciudad. El magma, que tiene un frente de 500 metros de ancho, con alturas de hasta 12 metros y se sitúa a unos 2,1 kilómetros de la costa, hasta ahora ha cubierto 166,2 hectáreas y su avance hacia el mar se ha ralentizado.
Debido al paulatino pero destructivo avance del magma, el P. Alberto Hernández, párroco de la Iglesia San Pío X, ubicada en la Calle Todoque, Los LLanos de Aridane, provincia de Santa Cruz de Tenerife, isla La Palma, decidió ir al templo a rescatar lo más valioso que tenía.
Cabe destacar que de las cuatro parroquias que el sacerdote sirve en la isla La Palma, la parroquia de San Pío X es la que estaba más en riesgo, porque se ubica más cerca del magma expulsado por el volcán. Por ello, estos días los bomberos desplegaron esfuerzos para desviar la dirección del magma y así lograr salvar la iglesia.
Según el semanario español Alfa y Omega, el operativo de rescate en el que participó el P. Hernández se dio el lunes 20 de septiembre por la tarde, gracias a que el Ayuntamiento de Los Llanos se contactó ese mismo día con el sacerdote "para organizar una visita exprés y salvar lo más valioso".
Fue así que en medio de una "lluvia de cenizas" y del humo, el P. Hernández ingresó a su parroquia y "rescató con la ayuda de un feligrés, al Santísimo, el sagrario y alguna reliquia", histórica de su parroquia, que fue fundada hace más de 60 años. Luego, tras guardar "lo más importante", cerró las puertas del templo a las 6:16 p.m.