El abad del Monasterio de Santa María de Poblet, (Tarragona), el P. Octavi Vilà, aseguró estar profundamente avergonzado por la detención, y posterior puesta en libertad, del monje de 68 años que presuntamente había realizado tocamientos sexuales a una menor el pasado 15 de agosto.
Durante la homilía de la misa del domingo 28 de agosto, el P. Vilà lamentó haber sido piedra de escándalo para creyentes y no creyentes.
"Nos sentimos como comunidad intensamente doloridos porque quizás hemos hecho daño a un inocente, a una familia, a toda la Iglesia y a mucha gente", destacó el abad quien también subrayó que el monje está siendo investigado.
También recordó que hasta que no haya una sentencia firme se debe actuar con "misericordia" ya que el monje debe tener una defensa justa. Aunque también subrayó su compromiso en la lucha contra todo tipo de abusos en la iglesia con las oportunas medidas de prevención.
"Intensamente doloridos también porque un hermano nuestro está siendo investigado y la misericordia también debe prevalecer para él, acompañándolo espiritualmente, procurándole medios para curar sus heridas, con una defensa justa hasta una resolución definitiva", afirmó.
"Nos duele profundamente lo ocurrido y manifestamos compromiso y voluntad decidida de luchar contra todo tipo de abusos en la Iglesia y de hacer de este monasterio un lugar seguro para todos", afirmó el Abad Vilà y pidió "el perdón empapado en propósito de enmienda".