La Diócesis de Sincelejo, en el departamento colombiano de Sucre, está asistiendo a los damnificados por las inundaciones provocadas por el desborde del río Cauca, e hizo un llamado a los fieles para que también colaboren con las necesidades de la población.
Según las autoridades locales, las inundaciones han dejado más de 2.226 damnificados y dos barrios completamente evacuados ante el riesgo de un nuevo desborde.
Una nota publicada en el sitio web de la Conferencia Episcopal de Colombia señala que la Diócesis de Sincelejo, está ayudando a las personas afectadas a través del Secretariado Diocesano de Pastoral Social, e invita al resto del país a ser solidarios.
"Confiamos en que el Estado y todas las instituciones que tengan que ver con este momento puedan activar sus protocolos y así podamos calmar el sufrimiento de estos hermanos nuestros", dijo el P. Ismael Acosta Pineda, director de Cáritas diocesana.
La parroquia Santo Cristo de Guaranda, dirigida por sacerdotes vicentinos, ha estado también junto a los afectados canalizando ayudas humanitarias.
Con el agua hasta las rodillas, el párroco P. Andrés Felipe Rojas, su vicario Leonidas Giraldo, el diácono Gabriel Martínez, un seminarista de la comunidad eudista y laicos de la pastoral social parroquial, recorren los sectores más afectados llevando comida y acompañamiento.