Iglesia dona 500 biblias para que la Palabra de Dios siga guiando a la Policía Nacional

 

Además, resaltó que para la Policía Nacional la Palabra de Dios "es aliento y hace parte de sus grandes valores institucionales", que se reflejan en su "gran lema que nos inspira: Dios y Patria".

Por ello, para poder ayudar a la formación de la fe, el obispado castrense donó 500 biblias a la Policía Nacional, para seguir acompañando "espiritualmente la vida pastoral de los hombres y las mujeres de la Fuerza Pública".

Mons. Ochoa resaltó que la "libertad religiosa es acompañar a los creyentes, la libertad religiosa es respetar las profundas creencias de aquellos que consideran que la palabra de Dios es revelación, es fundamento de altos valores éticos y espirituales".

Esta donación tiene lugar a pocos días del pedido de tutela realizado por el abogado de la Asociación de Ateos de Bogotá, Nicolás Calderón Grisales, que frenó la compra de 720 biblias para la Capellanía General de la Policía Nacional.

La acción de tutela es una garantía constitucional que se otorga a todo ciudadano colombiano para recurrir a las autoridades judiciales cuando sus derechos fundamentales son violados o se encuentran en peligro de vulnerabilidad.

Este pedido presentado por la Asociación de Ateos el 2 de agosto detuvo la compra de las biblias para las 64 capillas que se encuentran bajo la dirección de la Capellanía General de la Institución en los 32 departamentos del país.

Según indicó el diario El Tiempo, Calderón indicó que la tutela presentada pide la protección "de su derecho a la libertad de culto y el libre desarrollo de la personalidad".

La biblia es un libro de la religión cristiana "por lo que su compra por parte del Estado implica una violación al deber de neutralidad ante todas las religiones, por lo tanto, genera una violación directa al artículo 19 de la Constitución", indicó.

Además, señaló que la contratación lo discrimina "pues es ateo y se están utilizando los recursos públicos para la compra de libros religiosos".

En respuesta, la Policía Nacional indicó que "el Estado no es ateo, agnóstico o indiferente ante los sentimientos religiosos de los colombianos" y remarcó que Colombia es un "un Estado laico y pluralista, fundado en la libertad religiosa y la igualdad".

"Es precisamente frente a las condiciones de convivencia en paz, donde existe la intervención de las entidades religiosas en los escenarios de perdón y reconciliación, garantizando el ejercicio de la participación, la concertación y cooperación ciudadana de todas las personas… sin que pueda desconocer el compromiso social, que han adelantado algunas entidades religiosas y sus organizaciones, a través de diversos mecanismos e instancias, de manera continua, sin que se pueda desconocer el compromiso social, que han adelantado algunas religiones en la consolidación de la paz, el perdón y la reconciliación en Colombia en medio del conflicto armado", remarcó.